Lo que podría haberse convertido en un trauma infantil resultó en una anécdota de esas que enternecen en internet.
Los agentes entonces se movilizaron por el rescate de la fiesta. Convocaron a otros miembros de la corporación, además de colegas bomberos, y se dirigieron hacia la residencia del niño en sus vehículos oficiales, con derecho a sirenas prendidas, para la sorpresa del cumpleañero. En Twitter, la corporación afirmó que fue un honor participar de la conmemoración.
We were honored to attend Graham's 8th birthday party! 🎉🎂 https://t.co/ZJVrvYJA8m
— Hurst PD (@HurstPoliceDept) 29 de mayo de 2017
De acuerdo con el canal televisivo NBC, la familia se ha mudado al pueblo recientemente, por lo que el niño no tenía amigos muy cercanos. Pese a ello, enviaron invitaciones y prepararon pizzas y torta de chocolate, que fueron servidas a los oficiales que participaron en el festejo.
La madre, Jennifer Day, también había apelado a una red social barrial para invitar a los vecinos de última hora, por lo que algunos también terminaron sumándose al fin. En declaraciones a NBC, Graham dijo que los policías "arreglaron la fiesta".