El Ejército de Serbia tiene una larga historia. Desde el siglo XVI, ha luchado contra turcos, alemanes, austríacos, e incluso contra el poderío de la OTAN. Todos sus enemigos alaban su valor, pero pocos conocen su potencial. ¡Voy a mostrártelo!
1. La defensa de la Patria
En primer lugar, la defensa de la soberanía del territorio nacional contra los enemigos que pretendan violarla. En torno a este principio, el Ejército serbio tiene el deber de custodiar el espacio aéreo, terrestre y fluvial del país contra los adversarios que lo amenacen.
La participación en operaciones internacionales que contribuyan a la seguridad y al mantenimiento de la paz bajo la supervisión de la ONU.
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En tiempos de paz, se prioriza el entrenamiento intensivo de soldados y mandos con el fin de que, en caso de guerra, cumplan los objetivos marcados con la máxima eficacia.
Actualmente, el Ejército de Serbia está compuesto por soldados profesionales junto a miembros de la reserva, aunque se plantea en el futuro que se profesionalice completamente. Todas las actuaciones protagonizadas por las tropas serbias deben contar con el beneplácito del Parlamento serbio y del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas.
2. Poderío terrestre
Serbia posee una gran industria armamentística, heredera de la época de la antigua Yugoslavia. Eso se demuestra en la variedad y calidad del armamento de las fuerzas serbias.
El M-84 dispone de un cañón de 125 milímetros con 42 proyectiles en la recámara. Contra objetivos aéreos, tiene una ametralladora de 12,7 milímetros, además de una ametralladora de 7,62 milímetros acoplada.
El M-84 tiene un peso total de 41,5 toneladas y una tripulación de tres miembros. Gracias a sus motores con 1.000 caballos de potencia, puede alcanzar una velocidad de 60 kilómetros por hora.
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En cuanto a los sistemas antiaéreos, el Strela-1M es una de las 'joyas de la corona' de la defensa serbia. Los misiles guiados del Strela-1M alcanzan una velocidad de 420 metros/segundo, dificultando los ataques aéreos enemigos.
Con un alcance máximo de 28,5 kilómetros, el NORA A es usado para la destrucción de puntos defensivos del adversario, fuego de supresión y la neutralización de artillería y equipos enemigos.
El sistema tiene una tripulación de ocho hombres y usa la munición que utiliza el tanque M-84.
El Mil Mi-24, la 'pesadilla' de los terroristas https://t.co/v6ihpbhx17 pic.twitter.com/B6GmhTeUIP
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3. Protección del Espacio Aéreo
Para garantizar los objetivos de defensa aérea del país, Serbia posee cazas MiG-29 de superioridad aérea. Estos aviones alcanzan una velocidad máxima de Mach 2.3, con una cota de ascensión de 330 metros por segundo, gracias a sus motores RD-33. Como armamento, los MiG-29 serbios disponen de un cañón Gsh-30 y 3,5 toneladas de misiles guiados y bombas en seis puntos de anclaje, que le permiten alcanzar sus objetivos con facilidad.
En la parte inferior del fuselaje porta 200 kilogramos de bombas, que pueden ser sustituidas por otros sistemas. Su motor Shvetsov ASh-62 R9 le proporciona una velocidad máxima de 540 kilómetros/hora y una velocidad de ascensión de 480 metros/segundo. La tripulación de la aeronave la componen cinco miembros.
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Por último, para derribar objetivos aéreos, las Fuerzas Armadas cuentan con el sistema KUB-M, con tres divisiones completas ubicadas en Novi Sad, Kragujevac y Nis.
4. Escuadra naval
Al separarse Montenegro de Serbia en el año 2006, el país perdió su acceso al mar. No obstante, para la defensa y la protección de los ríos que cruzan el país, se ha constituido una división naval compuesta por seis dragaminas RML para operaciones contrainsurgentes, dos lanchas de desembarco DJC 411 Y 412 hechas con fibra de vidrio y, por último, el BPN-30 Kozara, que ejerce de nave de control y mando fluvial.
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Como podemos ver, las fuerzas serbias son formidables y están experimentando una mejora sustancial, con misiles balísticos como el Sumadija, que augura un futuro glorioso para un país que ha sufrido enormemente por la guerra.
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