"La canciller sí está en Washington, (pero) no está previsto que participe en la reunión de cancilleres, esperará el dictamen para fijar la postura de su país ante la prensa", dijo la fuente.
A esto se le sumaron las declaraciones del secretario general del organismo, Luis Almagro, en las que pidió que se le aplicara la Carta Democrática Interamericana a este país, lo cual podía conllevar a su expulsión.
Aunque el procedimiento para que Venezuela quede completamente desligada de la OEA demora dos años, su Gobierno aseguró que no tiene previsto acudir a las reuniones que convoque esa organización para atacar su soberanía o la de otros países.
Venezuela ha denunciado que la OEA es controlada por Estados Unidos, y ha calificado a Almagro como servidor de ese país.