"La oposición quiere que EEUU intervenga Venezuela, pero no lo lograrán, y a los países que están aliados para agredir nuestra patria en la OEA, venimos a decirles que se quedarán con los crespos hechos (con las ganas)", dijo a Sputnik el caraqueño Eustoquio Machado, uno de los participantes en la marcha.
El 31 de mayo en Washington, los cancilleres de la OEA sostiene una reunión sobre la crisis en Venezuela; además, el organismo estudia la posibilidad de crear un grupo para la mediación en el país.
Los seguidores del Gobierno repudiaron que el encuentro se celebre sin la autorización de su país, como se ha hecho en otras ocasiones, y consideran que se trata de un intento de injerencia.
"La Venezuela de (Hugo) Chávez y (Simón) Bolívar no acepta injerencias ni tutelaje, y aquí está ese pueblo diciéndole a la OEA, a su secretario general, (Luis) Almagro, y a EEUU que saquen sus pesuñas de nuestra tierra porque no volverán", dijo Josefina Gutiérrez, docente venezolana.
Por su parte, Yeli Ribas, trabajadora de la Misión Alimentación, manifestó que la única forma de que Venezuela logre la paz y se acabe la "guerra económica" es mediante el diálogo nacional, que asegura propuso Maduro convocando la Asamblea Nacional Constituyente.
"Quiero que por el bien de nuestros hijos se acabe esta guerra económica y por eso apoyo la Constituyente; necesitamos la paz para nuestras familias, y a la oposición le digo, si quieren que el país progrese trabajen por la paz y por el diálogo", dijo.
La oposición al presidente Maduro cumple el 31 de mayo 61 días en protestas de calle, que han dejado un saldo de 60 fallecidos y más de 1.000 de heridos.