"No es nuestro asunto: que la OTAN decida a quién y por qué pagar, esto no nos preocupa mucho", dijo en una entrevista con el diario francés Le Figaro.
A juicio del mandatario ruso, la Alianza Atlántica se contradice a sí misma cuando asegura que quiere tener buenas relaciones con Rusia y al mismo tiempo aumenta sus gastos militares.
"En la cumbre de la OTAN (del 25 de mayo en Bruselas) se dijo que la OTAN quiere normalizar las relaciones con Rusia, entonces ¿para qué aumentar los gastos militares? ¿contra quién quieren librar una guerra?", cuestionó.
En la última cumbre de Bruselas, los países de la OTAN decidieron elaborar anualmente planes nacionales sobre el incremento de sus contribuciones a la defensa.
En esos planes, los miembros de la Alianza indicarán cómo tienen previsto elevar los gastos militares hasta el 2% del Producto Interno Bruto (PIB) y participar en las operaciones conjuntas.
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