"Estados Unidos a nivel internacional ha fracasado en sus intentos de aislar a Venezuela y no ha podido llevar adelante sus intenciones, porque desde la llegada de la revolución (bolivariana) se ha desarrollado una política de diversificación de las relaciones internacionales", aseveró la experta.
"La relación de Venezuela no es exclusivamente subordinada a Estados Unidos, tal como sucedía antes de la llegada del comandante Hugo Chávez; ahora pasó a ser una política internacional más independiente, más soberana, con voz propia", indicó.
La abogada recordó que durante el gobierno de Chávez el país ganó muchos aliados al impulsar la lucha de los pueblos por su autodeterminación.
"Chávez tomó para sí muchas de las causas de los pueblos, entre esos la lucha de los pueblos por la autodeterminación, los derechos del pueblo palestino, los derechos del pueblo estadounidense, los derechos también de otros pueblos, y eso choca con los intereses de Estados Unidos", observó.
Además, destacó el rol que desempeña Venezuela al ejercer la presidencia del Movimiento de Países No Alineados (Mnoal).
"Un país que estuviera de verdad aislado, no tendría la presidencia de una organización tan importante como esa a nivel mundial; otro elemento es que Venezuela actualmente preside la Asociación de los Estados del Caribe, que también es una organización sumamente importante a nivel regional", argumentó.
A juicio de Tajeldine la reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), celebrada el pasado 2 de mayo, demostró que el aislamiento "solamente se encuentra en las grandes corporaciones mediáticas y en las malas intenciones de Estados Unidos".
En la Celac un gran número de naciones "que no están comprometidas con la violación de la soberanía e injerencia de los países", le dieron un espaldarazo a Venezuela y al proceso de diálogo con la oposición que impulsa el presidente Nicolás Maduro.
El jueves el Departamento del Tesoro de EEUU añadió a ocho integrantes del Supremo Tribunal de Justicia de Venezuela (TSJ) a su lista de sanciones.
Desde Washington acusan al Gobierno del presidente Nicolás Maduro de presunta corrupción y de ser el responsable de la crisis económica que vive el país caribeño.
El TSJ y varios integrantes del Gobierno venezolano repudiaron la medida, calificándola de injerencia en los asuntos internos del país.
Desde que a principios de abril comenzaron las manifestaciones callejeras de la oposición en contra del Gobierno han muerto 45 personas y cerca de un millar han resultado heridas en diversos episodios registrados durante las movilizaciones.
Gobierno y oposición se acusan de la violencia: los primeros aseguran que sus adversarios usan infiltrados en las manifestaciones para generar muertes y un escenario de ingobernabilidad, y los segundos acusan a Maduro de sostener grupos armados para generar terror y evitar que la gente salga a las calles a protestar.