"La política de privatizaciones que se ha estado promoviendo en Puerto Rico por casi tres décadas ha provocado la fuga de cerebros más grande de la historia" y está "destruyendo la economía", alertó el nacionalista.
Por otra parte, el líder independentista condenó la decisión de la Secretaría de Educación de Puerto Rico de cerrar 179 escuelas públicas con el objetivo de ahorrar unos 7,7 millones de dólares y así ayudar a afrontar la profunda crisis económica y fiscal que tiene el país, con una deuda pública que asciende a 70.000 millones de dólares.
López Rivera calificó de "criminal" a la Junta de Supervisión Fiscal, ente de control impuesto por EEUU para reestructurar la deuda pública del país caribeño, y advirtió que esta representa una "amenaza a la patria".
EEUU autorizó el traslado de López Rivera a la isla en febrero, luego de que en enero pasado Obama le conmutara la pena a cambio de que cumpliera cuatro meses más de su condena a 70 años.
López Rivera formaba parte de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN), una formación que apoyaba la independencia de Puerto Rico en los años 70.
El líder nacionalista fue detenido en 1981 y sentenciado a 55 años de cárcel por los cargos de conspiración sediciosa contra el Gobierno de EEUU, y una década más tarde le añadieron 15 años más a su condena por un intento de fuga.