"Señalar que el Partido Socialista no ha cumplido con la legislación tributaria por una norma especial concebida para el Partido Socialista, es completamente falso", afirmó a los periodistas el presidente del PS, Álvaro Elizalde.
El documento especificó que los ingresos por venta de acciones, bonos, créditos, depósitos a plazo y letras hipotecarias quedarían exentos del pago de impuestos.
Sobre esto, Elizalde aseguró que los partidos políticos son corporaciones, por lo que no pagan tributos por la renta generada de las inversiones en instrumentos de renta fija, según "lo que establece la ley".
"Todas las personas naturales y jurídicas deben pagar el impuesto a la renta; respecto de las inversiones en instrumentos de renta fija, la regla general es que no se paga impuesto a la renta; eso es lo que se le aplica a todas las personas jurídicas y naturales del país, con la sola excepción de las empresas", dijo.
Un reportaje emitido por el canal Mega de televisión reveló que entre 2004 y 2015, el PS chileno obtuvo acciones de la Sociedad Química y Minera de Chile y de Pampa Calichera, que hoy se enfrentan a la justicia por pago irregular a campañas políticas de diversos sectores.
"Nuestros bienes fueron expropiados en la dictadura, y con las indemnizaciones (del fisco), el PS decidió constituir una comisión de patrimonio que administrara las inversiones, para que se diera rentabilidad a las mismas para financiar el partido", explicó Elizalde hace unos días.
Entre 2000 y 2004, el Estado aportó a la colectividad alrededor de 7.200 millones de pesos (10,7 millones de dólares) para compensar lo ocurrido bajo el régimen dictatorial de Augusto Pinochet (1973-1990).
El dirigente agregó que la directiva del partido se reunirá para actualizar los estándares de exigencia respecto de la administración de su patrimonio, "para que no exista ningún atisbo de conflicto de intereses" y calificó las inversiones a empresas cuestionadas como "un error".
El patrimonio global del PS asciende a 8.000 millones de pesos (11,9 millones de dólares), lo que incluye todas las sedes partidarias a lo largo del país y los recursos conformes al patrimonio en inversiones, según cifras de la colectividad.