"Rusia no es país que tema algo, y con toda seguridad las acciones de China no están encaminadas a absorber a nadie", aseveró.
"Y no tomamos decisiones que nos dañen, solo estamos de acuerdo con las propuestas que nos beneficien", añadió.
El presidente aseveró que "es un pecado no aprovechar las posibilidades" que surgen a consecuencia de la cooperación con China.
"Rusia es un país abierto a la cooperación con todos los países y en la actualidad China también demuestra la misma apertura al mundo", destacó, al señalar que la víspera se reunió con representantes empresariales extranjeros.
El 14 y el 15 de mayo en Pekín se celebra el I Foro de Cooperación Internacional de la Franja y la Ruta con participación de presidentes y primeros ministros de 28 países.
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Propuesta por China en 2013, la iniciativa de la Franja y la Ruta busca construir una red de infraestructuras y comunicaciones y crear una plataforma de cooperación económica que conecte a decenas países de Asia, Europa y África reeditando las antiguas vías comerciales de la Ruta de la Seda.