La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) presentaron este lunes en Ginebra un plan de respuesta actualizado para salvar vidas a los refugiados sursudaneses en los seis países vecinos hasta finales de 2017: la suma que están buscando es casi el doble en comparación con los 781 millones de dólares que habían solicitado anteriormente, pero por el momento la financiación del plan no supera el 14%.
"El amargo conflicto y el deterioro de las condiciones humanitarias en Sudán del Sur están empujando a la gente fuera de sus hogares en números récord", dijo el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi.
"Los trabajadores humanitarios a menudo no pueden llegar a las personas más hambrientas y vulnerables. Muchos están muriendo de hambre y enfermedades, muchos más han huido de su patria al extranjero buscando seguridad", señaló.
La ONU estima que más de 1,8 millones de personas, incluyendo un millón de niños, huyeron de Sudán del Sur a Uganda, Sudán, Etiopía, Kenia, República Democrática del Congo y República Centroafricana en busca de refugio. El mayor número de los refugiados sursudaneses, casi 900.000, se encuentran en Uganda.
