Cheguet, el maletín nuclear de la III Guerra Mundial

Diseñado en la Unión Soviética, fue puesto en funcionamiento bajo el mandato del secretario general Yuri Andrópov (1982-1984) como respuesta a un ataque nuclear secreto que pudiera ser llevado a cabo por el enemigo. Al día de hoy, este temible sistema, Cheguet, sigue en funcionamiento, protegiendo a Rusia de la amenaza de una III Guerra Mundial. Vamos a ver las características que hacen tan peligroso a este 'maletín' nuclear.

1. Contrataque nuclear

Cheguet es el sistema de autorización que permite lanzar una respuesta nuclear contra un enemigo que use armas atómicas contra la Federación de Rusia. Tiene forma de maletín y funciona de la siguiente manera.

En caso de un ataque atómico contra Rusia, Cheguet permite el acceso a una red secreta de comunicaciones, conocida como Kavkaz, especialmente diseñada para una situación de emergencia nuclear.

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Desde Kavkaz se accede a Kazbek, que es la red de comunicaciones de los altos mandos militares y las fuerzas encargadas de los misiles nucleares, como la tropa de misiles estratégicos.

En el caso de que se dé orden afirmativa, se da autorización para abrir los códigos de acceso de los sistemas de misiles balísticos, desatándose una respuesta atómica sobre las fuerzas agresoras.

Según el coronel retirado Mijaíl Timoshenko, la red de comunicaciones Kavkaz no puede ser descifrada por los medios actuales, por lo que el sistema sería prácticamente inviolable garantizando su efectividad.

2. ¿Quiénes pueden usar Cheguet?

Tres altos cargos son los que poseen el Cheguet: el presidente de la Federación de Rusia, el ministro de Defensa y el jefe del Estado Mayor.

Esto se debe a que, si se produce una ofensiva nuclear sorpresa que abata a alguno de los mandatarios que disponen de Cheguet, en la mayor parte de los casos permanecerá con vida uno de ellos, para desatar la mortífera contraofensiva nuclear contra el enemigo.

​En todo momento, el presidente de la Federación de Rusia tiene en 'mano' a Cheguet gracias a una unidad técnica del servicio secreto que asiste al presidente en cualquier circunstancia.

Aunque el ministro de Defensa y el jefe del Estado Mayor también poseen copias de este dispositivo, no se sabe con exactitud si lo tienen activo en todo momento, como en el caso del presidente.

Como medida de seguridad, si el presidente de la Federación de Rusia tiene desconectado a Cheguet, ningún otro puede hacer uso de él.

3. Modificaciones de Cheguet

En lo referente a los aspectos tecnológicos, Cheguet permanece igual que en la época soviética, pero a nivel administrativo se han experimentado diversos cambios.

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El más importante ha sido el de dividir las competencias sobre Cheguet en varias agencias gubernamentales. En época de la URSS, el antiguo KGB ejercía control sobre el dispositivo por lo que, en caso de un golpe de Estado, el riesgo de que el dispositivo cayera en manos de un futuro golpista era muy elevado.

Por lo tanto, se prefirió en aras de la seguridad, que el sistema estuviera repartido en diferentes grupos gubernamentales ya que ninguno de ellos tendría el dominio completo sobre el maletín nuclear.

4. Símbolo presidencial

Desde el mandato de Boris Yeltsin, Cheguet ha sido considerado como el bastón de 'mando' de los líderes rusos, la prueba material del enorme poder que ostenta el presidente de la Federación, que puede desatar un contrataque nuclear contra todo aquel que desee entablar la III Guerra Mundial contra Rusia.

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