El expresidente llegó al aeropuerto Alfonso Pena de Curitiba en un avión privado y al desembarcar fue abucheado por una veintena de manifestantes, según consigna el diario Folha de São Paulo.
En paralelo, el centro de la ciudad acoge durante la mañana de este miércoles la "marcha roja", realizada por cientos de simpatizantes del PT y de Lula, como integrantes del Movimiento de los Sin Tierra (MST) y el sindicato Central Única de Trabajadores (CUT).
Está previsto que la declaración de Lula ante Moro comience a las 17:00 hora local (20:00 GMT) en la sede de la Justicia Federal de Curitiba, donde se montó un amplio dispositivo de seguridad para evitar altercados entre seguidores y detractores del expresidente.
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Lula responderá a las preguntas del juez Moro por el caso del apartamento de Guarujá (estado de São Paulo), que presuntamente habría recibido como soborno por parte de la constructora OAS; el expresidente lo niega rotundamente y pide que los investigadores aporten pruebas.
Asimismo, la expresidenta brasileña Dilma Rousseff llegó a la ciudad de Curitiba para prestar su apoyo a su correligionario y exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva.
"Ya estoy en Curitiba para prestar mi total solidaridad al presidente Lula (2003-2010); la verdad prevalecerá", escribió Rousseff (2011-2016) en su cuenta de Twitter minutos después de aterrizar en la capital del estado de Paraná.
Já estou em Curitiba para prestar minha total solidariedade ao presidente @LulapeloBrasil. A verdade vai prevalecer.#LulaEuConfio pic.twitter.com/0vblV6MPUB
— Dilma Rousseff (@dilmabr) 10 мая 2017 г.
Em Curitiba, seguimos na luta. Em #LulaEuConfio. pic.twitter.com/CymQYYVciF
— Dilma Rousseff (@dilmabr) 10 мая 2017 г.
Lula y Rousseff se encontraron en el aeropuerto Alfonso Pena, donde también acudieron el presidente de la Central Única de los Trabajadores, Vagner Freitas, y al coordinador del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra, João Pedro Stédile.