Cada año, después de las primeras lluvias de la primavera, los cangrejos recorren durante días el camino desde los bosques circundantes hasta la bahía de la costa sur de Cuba para reproducirse en el mar, causando estragos a su paso. Su meta es dejar los huevos en el agua.
La Bahía de Cochinos, donde en 1961 los exiliados cubanos aterrizaron en un intento fallido de poner fin a la revolución de Fidel Castro, se encuentra dentro de un parque nacional donde se puede observar el 80% de las aves endémicas cubanas, junto a cocodrilos y otras especies silvestres.