El Ejecutivo que preside Mariano Rajoy "rechaza enérgicamente las agresiones contra algunos diputados y hace un llamamiento al mantenimiento de la calma y a que se eviten actos de violencia adicionales".
El Ejecutivo español, teniendo en cuenta la elección de Talat Xhaferi como presidente del Parlamento por una mayoría de los diputados, llama a todas las fuerzas políticas para que se alcance una solución pacífica a sus divergencias y se constituya un gobierno "que facilite una salida a la grave crisis política que atraviesa el país y lance las necesarias reformas que le permitan avanzar en su perspectiva euro-atlántica", concluye en su comunicado.
Por su parte, Grecia está preocupada por la aguda crisis política en la vecina Macedonia, informó el Ministerio de Asuntos Exteriores griego.
"Con preocupación y angustia vemos que la Antigua República Yugoslava Macedonia se está sumiendo en una profunda crisis política", indicó la Cancillería.
El comunicado subraya que para resolver la crisis en Macedonia "se necesita que los bandos hagan prueba de respeto hacia los principios democráticos, la legalidad y la supremacía de la ley" así como hacia "la cultura del compromiso y consenso".
"La ausencia de estos principios crea un atolladero y un polvorín", señala el mencionado ministerio.
"Grecia que históricamente y de manera coherente enarbola el principio de la no injerencia en los asuntos internos de los países vecinos está dispuesta a ayudar, siempre que se lo pidan, a paliar la crisis de acuerdo al derecho internacional y el respeto de la independencia, la integridad territorial y la soberanía de la Antigua República Yugoslava de Macedonia", señala el texto.
La elección de Talat Xhaferi, de la minoría albanesa, como presidente del Parlamento de Macedonia provocó protestas multitudinarias en la capital Skopje y ataques de los manifestantes contra la sede parlamentaria.
Los enfrentamientos con la policía se saldaron con al menos cien heridos.
La iniciativa se topó con la oposición de la alianza conservadora VMRO-DPMNE que había permanecido en el poder más de 20 años.
El presidente del país, Gjorge Ivanov, se negó a otorgar mandato al líder de los socialdemócratas, Zoran Zaev, para que formara el gobierno alegando que el gabinete propuesto amenazaba la integridad y la independencia del país.
Lea más: Oposición de Macedonia se opone a que ex primer ministro forme nuevo Gobierno
La situación en Skopje se desarrolla en el contexto de los llamamientos de varios políticos de Albania a crear una "Gran Albania".
Grecia solicita que el país vecino se llame La Antigua República Yugoslava de Macedonia, el nombre provisional que figura en la lista de la ONU, para evitar la confusión con una región homónima griega.
El conflicto entre Skopje y Atenas continúa desde 1991, lo que dificulta la integración de la exrepública en la UE y la OTAN.
Atenas cree que Skopje pretende reclamar el territorio de la región griega de Macedonia, ya que el país vecino se niega a cambiar de nombre para poner fin a una disputa lingüística de hace 25 años.