"Las propuestas de nuevas denominaciones se basan el en el principio general de recuperar los nombres antiguos de las calles, especialmente cuando son aún recordados y nombrados así por los vecinos", comunicó el Ayuntamiento.
Esta propuesta, que lleva a la capital española a cumplir por primera vez con la Ley de Memoria Histórica aprobada en 2007, fue aprobada con los votos a favor de todos los grupos políticos municipales a excepción del conservador Partido Popular.
Además de los cambios en nombres de calles, el informe del Comisionado de la Memoria Histórica pide la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos conmemorativos de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura del general Francisco Franco.