Los tres buceadores fallecidos todavía se encuentran atrapados en una cueva submarina, a una profundidad de 58 metros, según el sitio web del canal. Entre las víctimas hay dos profesores rusos de la Universidad de la Polinesia Francesa.
Un buzo profesional descubrió los cuerpos en el atolón de Rangiroa, pero no pudo recuperarlos.
Los tres submarinistas —una pareja de rusos y un empleado de un club de buceo— se daban desaparecidos desde la mañana del 22 de abril.
Salieron a la laguna del atolón, pero nunca regresaron.
La agencia AFP, que cita a la Comisaría Suprema de la Polinesia francesa, identifica a los fallecidos como el profesor de Matemáticas Alexéi Zikin, su esposa Tatiana Makárova, y el instructor de buceo Gilles Demée.
Situado a 350 km de Tahití, Rangiroa es un atolón de las islas Tuamotu que forman parte de la Polinesia Francesa.