Zelaya fue expulsado del Gobierno y del país el 28 de junio de 2009, luego de haber organizado una consulta informal a la ciudadanía en la que pretendía preguntar si había mayoría para reformar la Constitución e incluir entre esos cambios la reelección presidencial.
Por entonces, tanto la Corte Suprema de Justicia como el Congreso convalidaron el derrocamiento de Zelaya a manos de los militares, argumentando que la Constitución hondureña era inmodificable pues contenía cláusulas "pétreas", entre ellas las que prohibían la reelección.
En 2015 la Corte Suprema declaró inaplicable el artículo 239 de la Constitución, que prohíbe la reelección al establecer que "el ciudadano que haya desempeñado la titularidad del Poder Ejecutivo no podrá ser elegido presidente de la República o Designado Presidencial".
De esa forma, sin necesidad de una reforma constitucional que debe ser refrendada por voto popular, el actual presidente Hernández podrá presentarse como candidato en los comicios del próximo 26 de noviembre.
Para Zelaya, en 2009 se produjo una conspiración en su contra "financiada por las agencias petroleras norteamericanas y europeas, que nació desde los halcones de Washington", según dijo.
El Gobierno de Zelaya se había acercado al entonces presidente de Venezuela, Hugo Chávez (1999-2013) e incorporado Honduras a Petrocaribe, el acuerdo para suministrar a países caribeños y centroamericanos crudo venezolano con condiciones flexibles de pago.
"Al sacarme (del Gobierno), sacaron a la competencia de Honduras, por eso el escenario de ahora es diferente al de 2009", manifestó.
Petrocaribe fue creado en 2005 a instancias de Chávez y reúne, además de Venezuela, a Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Nicaragua, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y Las Granadinas y Surinam.
Venezuela entrega alrededor de 150.000 barriles (de 159 litros) diarios de petróleo a los países beneficiarios del esquema, y estos pagan la mitad a 90 días, en tanto el resto se convierte en financiamiento blando.
Doble discurso de EEUU
A juicio de Zelaya, otro asunto que lo diferencia con Hernández es que "Estados Unidos lo está apoyando".
La Organización de los Estados Americanos (OEA) se pronuncia en contra de Venezuela, "pero no en contra de Honduras, cuya situación es más crítica dada la violencia, la pobreza y el fraude electoral" que vive ese país centroamericano, dijo Zelaya.
"La OEA guarda silencio y Estados Unidos tiene un doble discurso con Honduras", insistió.
Sin embargo, advirtió, tras el triunfo de Mauricio Macri en Argentina y "el golpe de Estado" contra la presidenta brasileña Dilma Rousseff, "la derecha pronto volverá a perder elecciones, volverá a perder el poder por la aplicación de un modelo neoliberal explotador y excluyente", concluyó.
El exmandatario lidera actualmente el opositor Partido Libertad y Refundación, cuya candidata para las elecciones de noviembre es Xiomara Castro, esposa de Zelaya.