Ledell Lee, condenado por el asesinato de Debra Reese hace más de 20 años en un suburbio de Little Rock, murió a las 23:56 hora local del jueves (4:56 GMT de este viernes) en Cummins Unit, una prisión del sureste de Arkansas, y es "el primero de cuatro reclusos a ser ejecutados antes de que el suministro de inyecciones letales del estado expire a fines de mes", dijo en un comunicado la organización Amnistía Internacional.
A Lee le inyectaron tres fármacos: midazolam, para dejarlo inconsciente; bromuro de vecuronio para detener su respiración y cloruro de potasio para detener su corazón, dijo este viernes The New York Times.
La fiscal general de Arkansas, Leslie Rutledge, afirmó en un comunicado que la familia de la víctima "esperó más de 24 años para que se hiciera justicia".
Suspensiones
Los abogados de los condenados habían logrado en la última semana suspensiones temporales de distintos jueces y tribunales de Arkansas, luego de que el Gobierno del Estado decidiera programar ocho ejecuciones en 10 días para usar los fármacos antes de que expiren el 30 de abril.
"La Corte Suprema de Arkansas ha concedido la solicitud del interno Stacey Johnson para una suspensión de la ejecución", informó Rutledge en la red social Twitter.
The Arkansas Supreme Court has granted Inmate Stacey Johnson's request for a stay of execution. #ARexecutions #arpx
— Leslie Rutledge (@AGRutledge) 19 de abril de 2017
La justicia tomó esta medida para autorizar nuevas pruebas de ADN con el fin de determinar la culpabilidad de Johnson, uno de los ochos que se encuentran en el pabellón de la muerte, en la violación y asesinato de una mujer en 1993.
Mientras, un juez estatal emitió una orden más amplia que prohibió temporalmente al estado usar bromuro de vecuronio en la inyección letal, informó el diario The Washington Post.
Esa fue la tercera vez que la justicia del estado suspendía una ejecución, la primera fue el viernes 14 y la segunda el lunes pasado.
En esas dos ocasiones, la Corte de Arkansas impidió la aplicación de la pena capital contra Don Davis y contra Bruce Ward, ambos condenados por homicidio.
En marzo, el gobernador Asa Hutchinson (del gobernante Partido Republicano) firmó órdenes autorizando las ejecuciones de un total de ocho condenados, programadas entre el 17 y el 27 de este mes.
Amnistía Internacional deplora regreso de las ejecuciones a Arkansas
La organización humanitaria Amnistía Internacional repudió la ejecución de Ledell Lee en Arkansas, pues demuestra que ese estado trata "a los seres humanos como si tuvieran fecha de caducidad".
"Hoy es un día vergonzoso para Arkansas, que está apresurando el proceso judicial y trata a los seres humanos como si tuvieran fecha de caducidad", dijo James Clark, director de campañas de la oficina de Amnistía Estados Unidos, en un comunicado.
Las 20 ejecuciones de 2016 constituyeron el número más bajo registrado desde 1991, mientras la cantidad de aplicaciones de la pena de muerte ha caído anualmente desde 2009 (excepto en 2012, cuando se mantuvo igual), agregó Amnistía.
"Arkansas está corriendo en la dirección opuesta al progreso. Esta línea de montaje de ejecuciones debe parar y este castigo cruel e inhumano debe abolirse de una vez por todas", agregó Amnistía.