Se señala que los ataques de morteros y de artillería se lanzaron en la provincia de Shahba.
Las fuerzas kurdas, indica, repelieron estos ataques hiriendo al menos a nueve miembros de estos grupos armados.
En agosto de 2016 el Ejército turco lanzó la operación Escudo del Éufrates con el apoyo de sectores suníes de la oposición armada siria para impedir que los kurdos tomaran el control del norte de Siria.
Las tropas turcas y los opositores se apoderaron de Yarabulus y Al Bab.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan aseguró que el objetivo de su país era expulsar a los terroristas de los territorios fronterizos del norte de Siria y crear una zona de seguridad para los desplazados internos de 5.000 kilómetros cuadrados.
A finales de marzo Turquía dio por finalizada la operación, aunque mantuvo sus tropas en territorio sirio.
El ministro de Exteriores, Mevlut Cavusoglu, explicó que los soldados turcos permanecerán en Siria hasta que las fuerzas locales tomen por completo el control de la situación y el 3 de abril Erdogan anunció que su país se prepara para nuevas operaciones en la zona.