"Queremos aumentar el atractivo de las Fuerzas de Autodefensa de Japón (FAJ), adaptarlas a los tiempos y al entorno, ampliar la contratación de mujeres, levantar importantes restricciones sobre su admisión, mejorar el ambiente laboral y promover a las empleadas", cita a Inada el sitio web del departamento militar.
Las limitaciones se mantendrán en las unidades de protección radiológica y en los submarinos, en los que resulta difícil habilitar camarotes femeninos por falta del espacio.
Las mujeres en Japón tienen derecho a enrolarse en las Fuerzas de Autodefensa desde 1993.
Actualmente, unas 14.000 japonesas prestan servicio militar, lo que representa un 6,1% de la plantilla.
En 1955, cuando se formaron las Fuerzas de Autodefensa de Japón, solo había 144 empleadas, o un 0,1%.