El tribunal de la Audiencia Nacional decidió por mayoría de 2 a 1 que Rajoy sea citado a declarar en el juzgado en una fecha aún por determinar.
Sin embargo, la ley da la posibilidad de que se declare por escrito cuando el testimonio se refiere a hechos conocidos por razón de su cargo de jefe del Ejecutivo.
No obstante, en este caso la declaración versa sobre hechos que no tienen que ver con su función como presidente, sino como presidente del partido, por lo que en ese supuesto, podría declarar en su domicilio o en el despacho oficial siempre y cuando lo permita el juzgado.
Esta solicitud de comparecencia la formuló la acusación popular, la Asociación de Abogados Demócratas por Europa (ADADE).
La Fiscalía por su parte no considera "ni útil ni necesaria" la declaración de Rajoy.
La declaración del presidente "no aparece como relevante por cuanto no aparece con potencialidad para modificar el sentido del fallo", afirmó la fiscal Concepción Nicolás.
Los partidos de la oposición manifestaron su satisfaction por la decisión judicial y piden que se esclarezca lo ocurrido en este caso de corrupción.
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Los socialistas del PSOE y Podemos se mostraron partidarios de que Rajoy comparezca en la comisión que investiga la corrupción en el Congreso de los Diputados.