"Este año realmente el clima fue el principal motivo para el crecimiento de la cosecha; tuvimos un clima excelente, pero también nos estamos comparando con el año anterior, cuando tuvimos el problema de la sequía, que afectó mucho a la producción en los estados", explicó el gerente especializado en agricultura del IBGE, Carlos Alfredo Guedes.
La lluvia que cayó en los estados productores desde la época de plantación, iniciada en octubre del año pasado, hasta ahora contribuyó a alcanzar esos datos positivos, añadió el organismo estatal.
La soja, el arroz y el maíz serán los principales productos nacionales, ya que sumados representan el 93,5% del total producido.
El estado de Mato Grosso, al suroeste del país, seguirá siendo el granero de Brasil, pues producirá el 25,3% de total de esta cosecha récord, seguido por los estados sureños de Paraná (18,3%) y Rio Grande do Sul (14,8%).
Según los datos del IBGE, se estima que el área recolectada este año será de 60,7 millones de hectáreas, un 6,3% más que en 2016.
Los productos agrícolas, especialmente la soja, son las principales materias primas que Brasil exporta, por lo que la buena cosecha que se espera este año podría tener un impacto beneficioso en la economía del país, que acumula dos años seguidos de recesión.