"El referéndum es un derecho natural de cualquier pueblo, incluido el nuestro", aseguraron los políticos, según el centro de prensa de la Unión Patriótica del Kurdistán (YNK, por sus siglas en kurdo).
También recordaron que el primer ministro del Kurdistán iraquí, Nechirvan Barzani, aseguró el pasado 23 de marzo en una entrevista con el sitio web Philly.com, que el referéndum sobre la independencia se celebrará este año.
Los intentos de las autoridades kurdas de celebrar una consulta independentista han sido condenados repetidamente por Bagdad.
En julio del 2014 el entonces primer ministro Nuri al-Maliki calificó la iniciativa de "anticonstitucional" y aseguró que "nadie está autorizado a aprovecharse de la situación que atraviesa Irak (…) y saciar sus propios intereses".
El "plan Biden" para Irak
La independencia del Kurdistán iraquí cuenta con el apoyo de influyentes políticos y centros de investigación en Washington.
La iniciativa de los legisladores estadounidenses fue duramente rechazada por las autoridades iraquíes.
El primer ministro Haidar al-Abadi aseguró al entonces vicepresidente de EEUU, Joe Biden, que "Irak rechaza firmemente cualquier plan que busque debilitar su unidad y violar su soberanía".
El vicepresidente estadounidense aseguró en ese momento que su país apoyaba la integridad de Irak y solo brindaría apoyo a los militares kurdos y suníes si el Gobierno de Bagdad lo solicitaba.
Sin embargo, el propio Joe Biden había presentado en noviembre 2006 cuando era senador un plan para "poner fin a la violencia sectaria en Irak" que estipulaba la división del país árabe en áreas federales.
La iniciativa no prosperó en su momento, pero una vez que Joe Biden se convirtió en vicepresidente de EEUU las autoridades del Kurdistán iraquí intensificaron los esfuerzos para lograr la independencia.
Durante el Gobierno de Barack Obama el presidente del Kurdistán iraquí, Masud Barzani, visitó Washington dos veces para debatir sobre "los retos políticos y de seguridad tras la derrota de Daesh" y agradecer por el "fuerte apoyo (de EEUU) al Kurdistán y a nuestros valientes Peshmerga" que combaten a los terroristas, según publicó en su cuenta de Twitter.
El propio Biden realizó una visita sorpresa a Bagdad y Erbil en abril de 2016, después de que su Gobierno destinará 415 millones de dólares a las milicias kurdas para combatir a Daesh.
Las riquezas del Kurdistán iraquí
Las tres provincias kurdas aprovecharon la caída de Husein y la posterior violencia que se instaló en el país para integrarse y formar el Gobierno Regional de Kurdistán.
La relativa seguridad y la estabilidad de la región permitió a las autoridades firmar varios contratos de inversión con empresas extranjeras.
En 2006, la empresa noruega de energía DNO perforó el primer pozo de petróleo desde la invasión de Irak en la región del Kurdistán.
Y en 2010, en una de las decisiones que más enfureció a Bagdad, el Gobierno kurdo firmó un contrato de exploración con ExxonMobil, al que le siguieron otros contratos con Chevron, Total and Gazprom.
Estas inversiones y la estabilidad de la región le ha permitido alcanzar al Kurdistán iraquí un mayor nivel de desarrollo que otras regiones del país.
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El gobierno kurdo sigue recibiendo una parte de los ingresos procedentes de las exportaciones de petróleo de Irak, pero ha manifestado su intención de aplicar una ley de inversiones extranjeras y establecer zonas de libre comercio cerca de las fronteras con Turquía e Irán.