"Cuando el señor Enríquez pida formalmente asilo político, el Gobierno de Chile debe conferirlo en forma inmediata", señaló el legislador en un comunicado.
Según el Ministerio de Relaciones Exteriores, el dirigente opositor solicitó la protección de Chile "fundado en diversas circunstancias políticas".
Uno de los principales dirigentes oficialistas de Venezuela, el diputado Diosdado Cabello, acusó a Enríquez de participar en un "plan golpista" contra el Gobierno de Nicolás Maduro y de estar "huyendo" del país caribeño.
Abogados de Enríquez afirmaron que había sido detenido por la Dirección General de Contrainteligencia Militar de Venezuela junto a otros militantes del mismo partido y acusado de "instigación a la rebelión y traición a la patria".
Medios locales venezolanos aseguran que el arresto se habría producido por una supuesta conversación que habrían mantenido en febrero pasado, en el que hablaban de impulsar una rebelión.
Según Tarud, Enríquez no tiene aún estatus de asilado, por lo que es necesario "un expedito salvoconducto para que sea acompañado por personal diplomático chileno al aeropuerto de Caracas" y sea "rápidamente autorizado para viajar al país".
Tarud, cuyo partido hace parte de la gobernante Concertación para la Democracia, descartó que esta acción constituya algún tipo de injerencia en la administración venezolana.
La Cancillería, por su parte, especificó que actuará en esta materia "de acuerdo con los principios jurídicos y humanitarios que inspiran su política exterior".
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El embajador chileno Ramírez, en tanto, se encuentra en Santiago por tiempo indefinido tras ser llamado a consulta por el Gobierno de Michelle Bachelet.