La semana pasada el TSJ transfirió a la Sala Constitucional los poderes de la Asamblea Nacional. Sin embargo la máxima instancia judicial del país caribeño dio marcha atrás con la medida.
"Lo que parece haber primado es la fuerte presión internacional por estas medidas del TSJ. Además, este tema hizo que de alguna manera resurgiera una oposición con bastantes problemas para movilizar a su gente", dijo el periodista.
Salgado explicó que, a pesar de que el TSJ retrocedió con su medida, los poderes públicos no establecieron una relación de diálogo. "No se ha salido de la situación de enfrentamiento entre la Asamblea Nacional y el Tribunal Supremo de Justicia. Esto continúa porque no se ha resuelto la cuestión del desacato en el que se encuentra la AN, según el TSJ", señaló.
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Para el periodista la confrontación entre estos poderes públicos no es algo que preocupe mayormente a los venezolanos. "La puja política entre el Gobierno, el TSJ y la AN no tiene un correlato directo en la gente. El ciudadano venezolano está preocupado por temas que tienen que ver con la economía, la inflación, el desabastecimiento producto del sabotaje económico", concluyó.