El vehículo de combate no tripulado, único en su tipo, es capaz de destruir tanques y helicópteros enemigos gracias a las modernas armas con las que está equipado, informó el canal televisivo ruso Zvezda.
El Uran-9 cuenta con cuatro misiles guiados antitanque Ataka, un cañón automático de 30 mm 2A7 y una ametralladora antitanques o un lanzallamas Shmel-M. Los proyectiles son capaces de impactar sobre blindados y aeronaves enemigas volando a baja altura a una distancia de hasta cinco kilómetros. Además, pueden destruir estructuras de hormigón, tales como fortines. El cañón y la ametralladora permiten luchar contra la infantería enemiga, mientras que el lanzallamas es indispensable para el combate urbano.
Totalmente cargado, el 'robotanque' pesa alrededor de 12 toneladas. El vehículo de combate no tripulado puede alcanzar una velocidad máxima de 35 km/h y, con una única carga de combustible, puede recorrer 200 kilómetros o funcionar ininterrumpidamente durante seis horas.