"Solicito intervenir en defensa de la dignidad de los diputados del Partit Demòcrata después de la expulsión del señor Homs por esta cámara en función de la sentencia del Tribunal Supremo", dijo Carles Campuzano, portavoz adjunto del partido político al que pertenece Homs.
Ana Pastor justificó su decisión alegando que las cuestiones relativas a la expulsión de Homs ya se debatieron en el Pleno de la Cámara durante el debate correspondiente a la concesión del suplicatorio del diputado ahora inhabilitado.
A raíz de la decisión tomada por la presidenta del Congreso, los diputados del Partit Demòcrata Europeu Català (PDeCAT) abandonaron la sala junto a los parlamentarios de Esquerra Republicana de Cataluña, del grupo confederal Unidos Podemos y del partido valenciano Compromís.
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Los parlamentarios volvieron a sus asientos al cabo de un rato con excepción de los diputados del PDeCAT, que mantendrán su gesto de protesta hasta el próximo miércoles.
"En defensa de la dignidad, la democracia y la libertad que representa Francesc Homs, hemos abandonado el Pleno del Congreso", escribió Carles Campuzano en su cuenta de Twitter tras el suceso.
Por su parte, el portavoz de Esquerra Republicana de Cataluña, Joan Tardà, criticó la respuesta "autoritaria" de España ante el independentismo catalán y opinó que "la democracia siempre triunfa".
En defensa de la dignitat, la democràcia i la llibertat que representa @franceschoms hem abandonat el ple del @Congreso_Es. #hotornariaafer pic.twitter.com/MvlCHCeEFh
— carles campuzano (@carlescampuzano) 30 de marzo de 2017
"No nos parece sensato que se haya retirado de su posición a Homs y la Presidencia del Congreso debería haber dado la palabra a sus diputados para, al menos, ejercer su derecho a la defensa", expresó Pablo Iglesias, secretario general de Podemos.
La sentencia del Tribunal Supremo prohíbe al político catalán el ejercicio de cargos públicos durante un año y un mes, además de imponerle una multa de 30.000 euros.
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En la citada consulta, que no tenía carácter vinculante, participaron 2,3 millones de personas, de las que un 80 por ciento mostró su apoyo a la opción independentista.