"La producción en serie de los fusiles comenzó a principios de 2017 y tenemos como objetivo renovar todo el armamento utilizado en el Ejército", dijo Taskin citado por la agencia de noticias Anadolu.
Según recordó, hace 15 años solo el 20% del armamento del Ejército turco era de fabricación nacional mientras que hoy ese indicador alcanza el 60%.
"El armamento producido en Turquía probó su fiabilidad durante la operación Escudo del Éufrates", destacó el director general de la empresa estatal MKEK.
Turquía comenzó a mediados de 2016 la operación militar Escudo del Éufrates en el norte de Siria para reforzar la seguridad fronteriza y eliminar a lo largo de sus fronteras las amenazas de grupos terroristas.