"Sabemos que una inmensa mayoría de chilenos piensa que este Gobierno está conduciendo a Chile por un camino equivocado, que el país está estancado y que en algunos casos retrocediendo", señaló el militante del partido de derecha Renovación Nacional.
Piñera ha sido el único presidente de derecha que ha liderado Chile en los últimos 27 años, desde que el país sudamericano retornó a la democracia en 1990, tras 17 años de dictadura del general Augusto Pinochet (1973-1990).
En un acto en la comuna de Quinta Normal, en el sector poniente de Santiago, el presidenciable pidió que no se utilice su figura y la de su familia para una "inescrupulosa campaña sucia".
"Se ha instalado un ambiente de divisiones, de descalificaciones, de querellas, de comisiones investigadoras, muchas veces sin fundamentos y reñida con la verdad", dijo.
Se acusa a Piñera de haber utilizado información privilegiada para su propio beneficio, debido a que el fallo del tribunal extranjero finalmente favoreció a Perú, y le habría reportado ganancias, aseguró la querella presentada por el diputado comunista, Hugo Gutiérrez.
Asimismo, la justicia lo investiga por posiblemente haber contribuido a los negocios de su familia durante su mandato, al detener el proyecto termoeléctrico Barrancones, que se emplazaría en 2010 en el mismo lugar en que ahora se busca construir Dominga, una minera donde su familia invirtió por medio de Bancard.
"No participaré en la administración ni gestión de ninguna empresa y tomaré todas las medidas necesarias, incluso yendo más allá de la ley, para separar totalmente mi rol de presidente y abandonar cualquier interés, por legítimo que sea, de carácter privado", aseveró.
Remarcó que entre sus prioridades de Gobierno está crear empleos, mejorar los salarios, la seguridad del país, la educación y capacitación, perfeccionar las pensiones e integrar a los adultos mayores.
Por otra parte, subrayó que defenderá la soberanía y el territorio chileno "como siempre" y con "toda la voluntad".
Detalló que un posible nuevo mandato hará frente "a la revolución tecnológica, el cambio climático, la nueva globalización, la modernización del Estado y el desarrollo sustentable".
Los expertos aseguran que habrá una alta abstención en las votaciones de noviembre próximo, en línea con el 65 por ciento de personas que no acudió a sufragar en las elecciones municipales de octubre pasado.
En las pasadas elecciones presidenciales de 2013, un 59 por ciento de personas no votó para elegir a su presidente, aludiendo a una baja representación política y a un sentimiento de desconfianza hacia las instituciones oficiales.