Durante la reunión, el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, reconoció que la suspensión de la cooperación militar entre los dos países no ha beneficiado a nadie. Además, añadió que el país eslavo está dispuesto a restablecer las relaciones militares con los nipones.
Dmitri Streltsov, un experto en asuntos de Japón, no cree que se trate de algo fundamentalmente nuevo. "Son áreas tradicionales de cooperación, en las que los países colaboran desde finales de los 90, cuando se firmaron los protocolos correspondientes. La cooperación militar entre Rusia y Japón no está conectada con las doctrinas militares, y se centra en el cumplimiento de misiones humanitarias. Por ejemplo, trabajos de rescate y lucha contra el terrorismo y la delincuencia internacional, así como el intercambio de información y el fomento de la confianza en las zonas fronterizas para prevenir una variedad de incidentes impredecibles", comentó el analista a Sputnik.
Sin embargo, Dmitri Streltsov no está de acuerdo: "No se trata de eso. Es posible que China y Japón también tengan canales de cooperación y comunicación, pero no están dirigidos contra Moscú. La reunión de los ministros de Defensa del país eslavo y el nipón envía, por supuesto, la señal a otros países de que ambos territorios están reforzando sus relaciones políticas y militares. Pero esto no significa que ellos conspiren en algo sin que China lo sepa. Rusia tiene sus propios intereses en la región Asia-Pacífico ajenos al gigante asiático".
Aún así, Rusia y Japón han expresado preocupación mutua en relación con las nuevas armas en la región: el sistema THAAD en la península coreana y los más modernos sistemas de misiles costeros rusos Bal y Bastión en las Islas Kuriles. Ahora, la cumbre entre los dos países debería reducir a cero estas preocupaciones.