Silva consideró, además, que los rusos deben sentirse honrados de que Rusia sea la sede del evento deportivo, ya que "organizarlo es muy valioso para el país". El jugador subrayó que la Copa Confederaciones puede ayudar en la construcción de una "buena imagen" del país en la esfera mundial.
"Los rusos deben aprovechar esta ocasión porque, además, es una buena previa para el Mundial. Recibirán a la mayor competencia en poco más de un año, y la Copa Confederaciones les permitirá palpitar esa experiencia desde ahora", agregó Silva a FIFA.
Como parte del equipo nacional de Brasil, Gilberto Silva se consagró dos veces campeón de la Copa Confederaciones —en Alemania 2005 y Sudáfrica 2009-. Además, vistiendo el uniforme brasileño, el futbolista también ganó la Copa Mundial de Fútbol de 2002, celebrada en Corea del Sur y Japón.