"La interferencia de Turquía en nuestras elecciones es un hecho, y esta interferencia es totalmente inadmisible", dijo Radev en una entrevista concedida al canal televisivo BTV, al tiempo de asegurar que Sofía tiene intención de mantener relaciones de buena vecindad con Ankara.
"Quisiera llamar a una mayor calma y a evitar que se escalen tensiones por esa interferencia, las instituciones y los servicios competentes búlgaros están trabajando activamente para impedir cualquier intento de inmiscuirse en nuestro proceso electoral y en nuestros asuntos internos", manifestó.
El primer ministro en funciones de Bulgaria, Ognyan Gerdzhikov, afirmó que Turquía ha intentado en reiteradas ocasiones influir en las elecciones generales, instando a votar por determinados partidos.
El jueves, Bulgaria llamó a consultas a su embajadora en Turquía, Nadezhda Neynsky.