"El presupuesto salvaguarda el ciberespacio con 1.500 millones de dólares para actividades de protección de posibles ataques a las redes federales y otra infraestructura crítica", dice el texto del proyecto.
Esta partida implica nuevas herramientas para defender las redes de información y telecomunicaciones del Gobierno.
Además, el Departamento de Seguridad Interna aumentaría el intercambio de información con otras reparticiones gubernamentales y con empresas privadas.
La Oficina de Contabilidad del Gobierno dijo en un informe el mes pasado que el Departamento de Seguridad Interna debía ampliar sus esfuerzos para detectar y repeler ciberataques y mejorar las protecciones a la privacidad.
El reporte también reclamó más acciones del Gobierno para reclutar y entrenar expertos en ciberseguridad.


