"Se ha intensificado la actividad destructiva de los servicios especiales extranjeros con el fin de desestabilizar la situación social y política en Rusia", dijo en una reunión en el Distrito Federal del Sur.
Señaló que la situación en esta región se caracteriza por un mayor nivel de amenaza terrorista y extremista.
"Las autoridades ucranianas hablan abiertamente de organizar actividades subversivas", indicó.
La actividad de los grupos nacionalistas radicales y religiosos representa también una seria amenaza, junto con las actividades extremistas en internet y el crecimiento de la xenofobia entre los jóvenes, afirmó Pátrushev.