"Tenemos que diversificar, vamos a ir a Rusia, ellos quieren comprar carne de res y cerdo mexicanas, y vamos a intensificar las relaciones con la Unión Europea, ellos están interesados en la miel, el garbanzo, la carne y frutos tropicales", dijo el secretario federal de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, José Calzada.
El titular subrayó que "la fortaleza del sector agroalimentario de México va más allá de la frontera norte", y exhortó a los productores mexicanos a "formar un bloque unido, salir del área de confort y despertar el interés de los mercados internacionales".
La declaración fue hecha durante una gira de trabajo por el norteño estado de Coahuila, uno de los graneros de México y fronterizo con EEUU, que el secretario realizó acompañado por el gobernador de la entidad, Rubén Moreira.
Ventas de alimentos superan ventas petroleras
La agroindustria mexicana ha crecido de manera espectacular como generador de divisas en los últimos años con un superávit comercial, y casi duplicó durante el año pasado 2016 los casi 16.200 millones de dólares que aportaron las ventas petroleras, afectadas por bajos precios y la caída de la producción del décimo productor mundial.
"El año pasado se exportaron (desde México) más de 29.000 millones de dólares (en alimentos), de los cuales a EEUU se vendieron casi 25.000 millones, pero también somos buenos compradores, ya que el año pasado le compramos a ese país 20.000 millones de dólares de todos los productos alimentarios", dijo el titular de Agricultura y Ganadería.
En su discurso ante productores agropecuarios, Calzada sostuvo que "EEUU es un mercado natural de México, que va más allá del comercio, es un tema cultural, un territorio históricamente igual para las familias que viven de este lado y del otro, pero se deben buscar nuevos nichos para tener más opciones".
"México lo que requiere hoy es no solo producir más y mejor con mayor valor, sino diversificar los mercados", enfatizó para explicar un eje de la nueva estrategia comercial de México, que multiplicó por cinco su comercio con EEUU en dos décadas, hasta los 530.000 millones de dólares, e inclinó la balanza comercial a su favor con superávit de 63.000 millones de dólares.
Calzada envió un mensaje a los mexicanos acosados por políticas migratorias "provenientes de EEUU, y del extranjero en general, es que esta es su casa y lo poco o mucho que tengamos servirá para que México produzca y progrese".
México dejó de ser un país dependiente del petróleo al final de los años 1980, y se trasformó en una potencia exportadora de manufacturas, sobre todo autos, y productos agroindustriales.
"No sabemos en qué cambios están pensando nuestros socios de EEUU, pero el balance del libre comercio es positivo", dijo Calzada en diciembre pasado a Sputnik.
"En 22 años hemos crecido en todo lo que es horticultura y frutal, nos hemos convertido en una potencia hortofrutícola, con las exportaciones de 'berries' o bayas, y aguacates, entre otros productos demandados agrícolas en EEUU y Canadá", gracias al desarrollo de la industrial y al clima más benigno en el invierno de México, explicó.
El aumentado sustantivo de la producción agroindustrial, de 5,5% anual, incluye además "cervezas, tequilas, mieles enlatadas, en fin esos productos de exportación", dijo Calzada a esta agencia de noticias en una cumbre de negocios.