El periodo de la consulta soberanista podría ser entre el otoño de 2018 y la primavera de 2019, según la propuesta de la dirigente independista.
"Es importante que Escocia pueda ejercitar el derecho a decidir su propio futuro cuando las opciones sean más claras de lo que hoy lo son y antes de que sea demasiado tarde para decidir nuestro propio futuro", dijo en su residencia oficial de Bute House, en Edimburgo.
"El mandato del Gobierno escocés para ofrecer esta elección está más allá de cualquier duda", resaltó Sturgeon.
La dirigente nacionalista solicitará al Parlamento de Edimburgo que inicie la semana próxima los trámites para negociar con Londres los detalles del plebiscito.
La autoridad para convocar un referéndum reside en Westminster y fue transferida temporalmente durante la consulta de 2014 tras un acuerdo entre los entonces jefes de ambos gobiernos, David Cameron y Alex Salmond.
Sturgeon adelantó los plazos óptimos de la nueva consulta aunque dejó abierta la posibilidad de dar marcha atrás si Londres da respuesta a las demandas e intereses de Escocia en la negociación del Brexit.
El abanico temporal para la apertura de las urnas es amplio: del otoño de 2018 a la primavera de 2019.
Este calendario se ajusta a la anticipada evolución de las negociaciones Brexit, cuando los términos de la salida del Reino y la nueva relación con la UE deberían estar más claros.
"Este es el punto más temprano en que un referéndum será apropiado", confirmó Sturgeon.
La primavera de 2019 sería por otra parte el margen límite para que Edimburgo negocie la continuidad en la UE antes de la marcha del resto de Reino Unido, según explico la dirigente autonómica.
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 28 февраля 2017 г.
"Si descarto ahora un referéndum estaría decidiendo, completamente unilateralmente, que Escocia va a seguir el Brexit duro del Reino Unido a toda costa, sin importar el daño que ello supondrá a nuestra economía y nuestra sociedad", advirtió Sturgeon.
El 62% del electorado en Escocia votó en contra del Brexit en el referéndum de junio de 2016.
El Gobierno del SNP renovó su mayoría parlamentaria en Edimburgo en las autonómicas celebradas ese mismo año y el partido ocupa casi todos los escaños escoceses en Westminster.