El reciente artículo del medio ruso Svobódnaya Pressa analiza las perspectivas de la aviación estratégica norteamericana.
Selva recordó que los bombarderos estratégicos B-52 que fueron creados a mediados del siglo pasado, pronto no serán capaces de desempeñar sus tareas militares. Esto también atañe a los misiles y bombas con los que estos aviones están dotados: ya no son modernos puesto que fueron creados en los años 1970.
La aviación estratégica de Estados Unidos, en particular la parte que puede llevar armas nucleares, consta de 20 bombarderos B-2 Spirit y 76 unidades de B-52H Stratofortress.
El B-2 es un avión relativamente moderno que entró en servicio en 1997. Esta aeronave militar fue desarrollada con el uso de tecnologías furtivas. Su alcance es de unos 11.000 kilómetros y puede portar hasta 27 toneladas de bombas y misiles.
Sin embargo, el sistema de disuasión nuclear estadounidense mayormente depende de los viejos B-52. Estos aviones en realidad superan a los nuevos B-2 en varias características como alcance, techo de vuelo y carga. Los Spirit solo sobrepasan a los Stratofortress en sus capacidades furtivas y la falta de desgaste en sus mecanismos.
El Pentágono ya tiene planes de sustituir los dos bombarderos con aviones de nueva generación B-21. Se prevé que para el año 2037 la Fuerza Aérea de Estados Unidos cuente con 100 unidades de estas aeronaves.
Los gastos programados para el desarrollo del B-21 se cifran en unos 80.000 millones de dólares. También se dio a conocer el nombre de la empresa que diseñará el novedoso avión militar: es Northrop Grumman, desarrolladora de B-2 Spirit.
La nota asimismo se refiere al problema de municiones planteado por el general Selva al recordar que hace poco las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos tuvieron a su disposición misiles AGM-129 ACM, que entraron en servicio en 1993.
Estas armas tienen una potencia de 5 a 150 kilotones y son destinadas a realizar un ataque sin que el avión portador entre en la zona de defensa aérea del enemigo. No obstante, en 2007 todos los misiles de este tipo fueron retirados de la Fuerza Aérea del país.
En la actualidad los bombarderos pueden llevar solo los AGM-86B ALCM, más viejos y menos sofisticados. Y esto es todo con lo que cuenta la aviación estratégica norteamericana.