"Cada vez que se habla sobre este tema, se perturba el clima de diálogo, de conversación, que el país más bien reclama", dijo Saab en una rueda de prensa ofrecida en la sede de la Defensoría.
En mayo de 2016, el secretario general de la OEA, Luis Almagro, inició el proceso para la activación de la Carta Democrática por considerar que existe una alteración del orden constitucional y democrático en este país sudamericano.
Sin embargo, la medida no contó con el respaldo de dos tercios de los países miembros de la OEA, por lo que su aplicación fue rechazada.
Si resultara aprobada, se iniciaría un proceso de deliberaciones que podría llevar a la suspensión de Venezuela dentro de la OEA.
Saab dijo además que desde la llegada de Hugo Chávez (1954-2013) a la presidencia de Venezuela en 1999, siempre ha existido "esa amenaza de activar la Carta Democrática en contra el país".
En tal sentido, consideró esta resolución y las declaraciones de agradecimiento que ofreció al respecto el secretario del general de la OEA, Luis Almagro, son una provocación para el proceso de conversaciones que iniciaron el Gobierno y la oposición el 30 de octubre y que se suspendió en diciembre por diferencias entre las partes.
El defensor del Pueblo mencionó además que en pocos días viajará a Ginebra para reunirse con representantes del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.