El 28 de febrero, el Ministerio de Defensa de Corea del Sur firmó un acuerdo con la corporación Lotte sobre el despliegue en territorio surcoreano del sistema antimisiles estadounidense THAAD.
"Actualmente se puede afirmar con seguridad que el problema del THAAD es algo muy doloroso para China. Es difícil solucionar este conflicto porque implica a toda la parte noreste de Asia. Lógicamente, surgen preguntas: ¿Va Japón a desplegar su sistema antimisiles en un futuro? ¿Ampliará la cooperación de EEUU con este país asiático y Corea del Sur en estas esferas?", señaló el politólogo chino Da Zhigang en una entrevista con Sputnik.
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Las relaciones chino-surcoreanas se venían desarrollando velozmente desde su establecimiento en 1992. Sin embargo, este proceso tocó a su fin el 8 de julio de 2016, cuando transcendió la información de que Corea del Sur pretendía que se desplegara en su territorio el THAAD.
Además de que la posición de Seúl ofende al Gobierno de China, esta no coincide con los intereses de Corea del Sur, opina el experto. Es posible que tras el despliegue del THAAD, el mismo pueblo chino haga un boicot masivo contra el país vecino.
Los ciudadanos chinos podrían dejar de seguir la moda de 'lo surcoreano' y no adquirir productos procedentes de Corea del Sur, además de no viajar al país de vacaciones.
#EEUU podría emplazar el sistema #THAAD en Corea del Sur en julio próximo https://t.co/ZDLOId09EU pic.twitter.com/epcL1TUpkr
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 26 февраля 2017 г.
Estas y otras contramedidas económicas pueden conducir a la ralentización e incluso depresión de la economía surcoreana dado que, en primer lugar, afectarán a las industrias clave como la producción de automóviles y de celulares.
"Definitivamente, los representantes de los círculos económicos de Corea del Sur podrían arrepentirse del despliegue del THAAD", recalcó.