Asimismo, Cristo señaló que se buscará mantener la suspensión de las órdenes de captura para los guerrilleros de las FARC que no queden en libertad.
"Vamos a preparar un decreto con base en el procedimiento legislativo especial que garantice que culminado el día D+180 se mantiene la suspensión de las órdenes de captura para los integrantes de las FARC que no salgan libres o que no sean objeto de amnistía y que tengan que acudir a la JEP (Jurisdicción Especial para la Paz)", señaló.
La JEP, por su parte, es la instancia creada a partir de los diálogos de paz en La Habana para juzgar a aquellos actores del conflicto armado interno (tanto guerrilleros como militares), de manera tal que al reconocer sus crímenes puedan ser juzgados por esa vía y no por la justicia ordinaria.
De acuerdo con el alto Comisionado de Paz, Sergio Jaramillo, quien brindó las declaraciones en compañía de Cristo en la sede del Gobierno en Bogotá, se prevé que alrededor de 1.200 guerrilleros serán liberados en los próximos días.
"Esta semana serían amnistiados alrededor de 1.200 guerrilleros de las FARC y tendrían una resolución firmada por el alto Comisionado, lo que le permitiría a los jueces actuar para otorgar la amnistía", dijo Jaramillo, según su despacho.
Finalmente, destacó que el cronograma pactado con las FARC para la entrega de las armas se mantiene tal y como estaba acordado, es decir, que desde el miércoles comenzará dicho proceso.
Según lo acordado por el Gobierno y la guerrilla, la entrega de armas por parte de las FARC a una comisión de la ONU en Colombia se hará en secuencia y en tres fases de esta manera: al día 90 de alcanzado el Acuerdo Final de Paz, el 30%, al día 120, otro 30%, y al día 150, el 40% restante.
En la actualidad cerca de 7.000 rebeldes de las FARC se encuentran concentrados para comenzar su proceso de dejación de armas y regreso a la vida civil.
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El conflicto armado colombiano, que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares, agentes del Estado y grupos narcotraficantes por más de medio siglo, es el más antiguo del continente y ha dejado 300.000 muertos, 45.000 desaparecidos y 6,8 millones de desplazados, según reportes oficiales.