"Lo único que podemos es seguir llamando a ambos bandos a cumplir de inmediato con el acuerdo (sobre el alto el fuego), en caso contrario hay riesgo de una escalda militar reforzada con numerosas víctimas entre los civiles y de llevar la situación a un callejón sin salida", dijo.
"La verdad es que el alto el fuego acordado no se cumple", dijo.
Subrayó que en Múnich se acordó que Moscú y Kiev ejercerían su influencia para que se implementasen las decisiones tomadas por el grupo.
Precisó que se trata de la retirada de armas pesadas y el cumplimiento del alto el fuego del 20 de febrero al igual que de la entrega de datos sobre la ubicación de armas pesadas a la OSCE.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto pero no han derivado hasta ahora en el cese de la violencia cuyo resultado la ONU estima en más de 10.000 muertos y más de 22.700 heridos.