El RISE (Regulatory Indicators for Sustainable Energy), otorgó a Chile una puntuación global promedio de 76 (de 100), ubicándolo "en el primer lugar de Sudamérica, segundo de Latinoamérica, después de México, y 29 en el mundo", señaló el estudio.
Respecto al acceso a la energía, Chile obtuvo la máxima calificación, de 100 puntos.
Su puntaje en eficiencia energética fue de 50, y en el ítem energías renovables sacó 78.
El país sudamericano fue mal evaluado en las subcategorías de incentivos y mandatos del sector público (25), consumidores (22), y en utilidades y precios del carbono, en relación a las emisiones, donde registró calificación cero.
Al final de la lista, se encuentran Somalía, con 5 puntos; Haití, con 11, y Mauritania, con 13.
El Banco Mundial reflejó que países como México, China, Turquía, India, Vietnam, Brasil y Sudáfrica, buscan potenciar sus fuentes de energías sustentables, a través de "sólidas" políticas públicas, con el fin de convertirse en líderes mundiales en acceso y eficiencia energética.
La entidad apuntó además que aún existen regiones con escaso desarrollo en el área, como África Subsahariana, donde unos 600 millones de personas aún viven sin energía eléctrica.