"Es imposible resolver el conflicto sin la participación de Nagorno Karabaj", dijo a Sputnik.
"Siempre hemos dicho que estamos dispuestos a celebrar reuniones", dijo al agregar que si no se organizan "no es por nuestra culpa".
El conflicto de Nagorno Karabaj que divide a Armenia y Azerbaiyán desde 1988 experimentó una escalada a principios de abril de 2016 después de haber permanecido latente durante más de dos décadas.
Desde el 5 de abril se mantiene en la zona un armisticio frágil aunque los bandos del conflicto se acusan regularmente de violarlo.
Bakú perdió el control sobre Karabaj y siete distritos adyacentes tras la escalada de las hostilidades entre 1992 y 1994.
Para impulsar una solución negociada del conflicto se instituyó en 1994 el llamado Grupo de Minsk, copresidido por EEUU, Rusia y Francia.
Azerbaiyán insiste en recuperar su integridad territorial, mientras que Armenia defiende los intereses de la autoproclamada República de Nagorno Karabaj, que no es parte de las negociaciones.