La mayoría de los mensajes acerca de la muerte de Kim Jong-nam coincide en un punto: el incidente tiene relación con Corea del Norte. Hay dos causas por las que se vislumbra la mano de Pyongyang en este suceso, considera Dianjun.
El último punto de vista es apoyado por los medios surcoreanos, pero antes de que se den a conocer los resultados de la autopsia del hermano mayor de los Kim, es "irresponsable aventurar cualquier hipótesis", aseveró el experto.
Y recordó que, a día de hoy, Corea del Norte ha realizado un gran avance en el ámbito del desarrollo de las armas nucleares, puesto que efectuó pruebas con misiles balísticos. Según cree el entrevistado, esto acerca al país hasta un punto en el que a EEUU puede agotársele la paciencia. De manera que Washington influirá considerablemente sobre la situación política en Corea del Norte, así como sobre las relaciones con los países vecinos, puntualizó.
En la actualidad, los informes de los medios surcoreanos y japoneses ponen el foco en las relaciones entre China y Corea del Norte. Hay que recordar que Kim Jong-nam pasaba mucho tiempo en Macao (China). De hecho, el vuelo que iba a tomar en Kuala Lumpur se dirigía a este mismo lugar.
Según Dianjun, la muerte de Kim Jong-nam demuestra precisamente lo contrario. Pekín no tenía estos planes, dado que, si fueran verdad, el gigante asiático habría hecho todo cuanto estuviera en su mano para garantizar su seguridad. De modo que habría estado bajo supervisión y no podría haber salido del país de manera tan simple.
Ba Dianjun agregó que filtrar este tipo de informes ayuda, al fin y al cabo, a influir sobre las relaciones entre China y Corea del Norte, es decir, a alejarlos mutuamente con el fin de facilitar el emplazamiento de los sistemas THAAD en territorio surcoreano.