"Él está tratando de generar las condiciones (…) con su equipo de asesoría legal, para poder salir de la Embajada ecuatoriana", dijo el funcionario ecuatoriano en una entrevista con Ecuadorinmediato.
Long manifestó que el fundador de WikiLeaks "tiene el deseo de salir de la Embajada desde hace muchísimo tiempo", pues "en todos los contactos que hemos tenido con él, evidentemente está harto" ya que "las condiciones en las que vive son difíciles".
Estar "en un cuarto cuatro años y medio sin salir de él, en una ciudad oscura, con poco acceso a la luz exterior, sin salida al espacio exterior (…) son unas condiciones terribles", añadió el jefe de la diplomacia nacional.
El propio presidente Rafael Correa ratificó días atrás "una vez más que el señor Assange puede quedarse como asilado en nuestra Embajada", dijo Long.
Assange se encuentra en la sede diplomática desde junio de 2012, cuando perdió las apelaciones a un pedido de extradición formulado por la fiscalía de Suecia para juzgarlo por presuntos delitos sexuales.
El activista siempre se negó a presentarse en los tribunales suecos debido al temor de que ese país lo extraditara a EEUU, donde podría ser acusado de espionaje y condenado a muerte.
Long consideró que hubo avances importantes para llevar a cabo el proceso por los cargos en Suecia.
Semanas atrás, la Fiscalía ecuatoriana entregó a su par de Suecia el interrogatorio traducido al sueco realizado a Assange en la embajada.
A mediados de enero, el ciberactivista aseguró que si la exsoldado e informante estadounidense Chelsea Manning era liberada, él accedería a viajar a Estados Unidos.
Manning fue detenida en 2010 condenada a 35 años de prisión por haber entregado a WikiLeaks documentos secretos de las guerras en Afganistán e Irak y decenas de miles de cables diplomáticos.
En ese momento Assange ratificó su postura, "incluida la oferta de ir a EEUU si la sentencia de Chelsea Manning era conmutada".
El activista también dijo que se iniciaba ahora una etapa de negociaciones con el Departamento de Justicia de EEUU en el que este debía clarificar qué tipo de cargos tiene contra él y si le aseguraría un juicio justo.