El pasado 27 de enero Trump firmó una orden ejecutiva que suspende por 120 días la acogida de refugiados y que además veta por 90 días la entrada de ciudadanos de Irak, Irán, Siria, Sudán, Yemen, Libia y Somalia.
Calificó la decisión de "inesperada y rara" y señaló que el Gobierno, el Parlamento y el Ministerio de Exteriores de Irak hicieron sus declaraciones al respecto.
"Esperamos que la decisión se considere errónea", agregó.
Al Jaafari mencionó que ciudadanos y consejeros estadounidenses visitan Irak y Bagdad no limitó su entrada al país de ninguna manera.
Irak —subrayó— es "una víctima del terrorismo" y "emprende todos los esfuerzos para luchar contra el terrorismo y proteger a otros países".
Además, reportó que hace dos días las autoridades del país entregaron un mensaje a Trump sobre lo erróneo que son las medidas de este tipo respecto a los ciudadanos de Irak.
El lunes pasado el Parlamento iraquí pidió al Gobierno del país tomar medidas recíprocas ante el veto del ingreso de sus ciudadanos a EEUU y exigir a la Administración estadounidense que revise esta decisión.
De momento, Washington está analizando la resolución del Parlamento de Irak, comunicó el lunes a Sputnik un funcionario del Departamento de Estado.