"Este es sin duda un tema de preocupación de las sociedades desarrolladas; así como tienen la tecnología que les permite tener una mejor calidad de vida, también están expuestas a estas violaciones asociadas con el ciberterrorismo y otros delitos en este campo", explicó.
Acotó que el robo de información personal, la invasión a espacios privados y la expansión de información interesada se han convertido en las grandes amenazas a través de las nuevas tecnologías.
En el caso boliviano, el analista alertó que el país es "altamente vulnerable" a este tipo de eventos debido a su escaso desarrollo tecnológico.
"Estos "hackeos" son una amenaza que viene de fuera de Bolivia con la intención de perjudicar al Estado boliviano, viene de personas vinculadas grupos delincuenciales que tienen intereses económicos", sostuvo.
Bolivia no tiene otra opción que tener como aliados a los países que han logrado un desarrollo tecnológico que les permite crear sus propios "cortafuegos" y fortalecer su ciberseguridad frente a las amenazas internas y externas, declaró Cordero.
El tema de la ciberseguridad volvió a escena tras el anuncio del presidente de EEUU, Donald Trump, de firmar una orden ejecutiva sobre seguridad informática que hará responsable a cada secretario del gabinete de seguridad de los datos de su departamento, y exigirá mejorar los sistemas federales existentes de tecnología de la información.
La firma, prevista para el martes, fue suspendida por la Casa Blanca, que no brindó mayores detalles al respecto, ni brindó una nueva fecha para su oficialización.