Según un aviso colocado hoy en Amona, transcurridas las 48 horas del plazo, que empezó la medianoche de ayer, el Ejército israelí prohibirá la entrada en este asentamiento y no se permitirá que nadie se quede en sus instalaciones.
La orden exige a los colonos que retiren sus propiedades del asentamiento, ilegal según la ley israelí y construido en tierra privada palestina, antes de las 12 de la noche de mañana miércoles, pero los colonos alegan que recibieron la orden hoy por la mañana.
Los habitantes de Amona tienen la posibilidad de presentar una demanda contra la orden durante las 48 horas.
El Supremo dictaminó que los colonos tenían que abandonar Amona porque está construida en tierras palestinas privada y hoy tenía que pronunciarse sobre el plan de reubicación de los habitantes de esa colonia.
La propuesta prevé instalar a los colonos en otras tierras cercanas, en Cisjordania, pero varios palestinos alegaron tener documentos que demuestran su propiedad o tener vínculos con dichos terrenos.