El rublo "probablemente será el principal beneficiario" si Estados Unidos alivia la presión de las sanciones, y pueda alcanzar una tasa de 55-57 frente al dólar, según Bank of America Corp.
Por su parte, los expertos rusos sugieren que esta tendencia tendría poco que ver con las sanciones exteriores explicando que el impacto de las sanciones en la economía rusa no es mayor que un 0,3% de su PIB.
Desde el inicio de la confrontación política con el bloque de países liderado por EEUU, Rusia está pasando por un período de profundas trasformaciones económicas. Lejos de lo que se esperaba, las sanciones a largo plazo impulsaron la independización del sector financiero nacional de las instituciones internacionales, así como el incremento de la producción interna de bienes y servicios.
Los resultados no se han hecho esperar. Según investigaciones de principios de año, Rusia en 2016 entró en la lista de países con mejores índices de inversión. Según las previsiones del Gobierno ruso y del Fondo Monetario Internacional, la economía nacional iniciará este año su crecimiento después de tres años de recesión.