"Los laboristas respetan la voluntad expresada por los británicos en el referéndum y no frustrarán el proceso de activación del artículo 50 (del Tratado de Lisboa)", dijo Corbyn.
Los laboristas, añadió, defenderán los principios de acceso pleno y totalmente libre de aranceles al mercado único, así como el mantenimiento de los derechos de los trabajadores y los mecanismos de protección sociales y medioambientales.
Corbyn exigió del Gobierno un plan para asegurar que responderá ante el Parlamento durante las negociaciones de Brexit y una votación consciente durante la aprobación del acuerdo final por los legisladores.
Además, el opositor Partido Laborista británico exige que el Gobierno presente un plan detallado de las negociaciones sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea.
El portavoz del Partido Laborista para el Brexit, Keir Starmer, declaró que la oposición considera insuficiente el reciente discurso de la primera ministra Theresa May.
Poco antes, el Tribunal Supremo del Reino Unido dictó que el Ejecutivo de Theresa May tiene que someter al escrutinio del Parlamento de Westminster la activación oficial del proceso de salida de la Unión Europea.
En junio de 2016, el Reino Unido celebró un referéndum sobre la permanencia en la UE, en el que el 51,9% de los británicos votó a favor del Brexit.
La primera ministra británica, Theresa May, declaró con anterioridad que la notificación oficial sobre el Brexit sería enviada a Bruselas a finales de marzo de 2017.